¿Qué es el reiki?
El Reiki es una técnica japonesa de sanación natural.
Los kanji (o carácteres) japoneses no se traducen facilmente al español ya que son complejos y representan conceptos en vez de palabras. Sin embargo, “rei” en japonés significa alma, mientras “ki” significa la energía (juntos ‘la energía del alma’, o a menudo, ‘la fuerza vital’).
Un facultativo de reiki no tiene ningún poder de sanación por sí mismo. La práctica del reiki es guiada por una inteligencia espiritual superior que sabe exactamente donde canalizar la energía de la fuerza vital para responder a las necesidades particulares de cada cliente.
El facultativo es simplemente un facilitador que canaliza la energía de la fuerza vital, permitiendo que fluya a través de él, y por ende, a través del cliente por la imposición de manos. Como tal, el flujo de la energía de la fuerza vital en el cuerpo promueve la sanación de la mente, del cuerpo y del espíritu del cliente.
¿Cómo empezó?
El Reiki fue fundado por el Dr. Mikao Usui, que nació en Japón en 1865 en una familia adinerada. Dr. Usui estudió el budismo, artes marciales y otras técnicas japonesas de meditación y sanación.
Dr. Usui quiso entender el propósito de su vida y se dedicó a buscar la iluminación entonces se ingresó a un monasterio. Después de unos años sin progreso, expresó su frustración al abad del monasterio, quien le avisó que su último deber era meditar y ayunar durante 21 días en la montaña sagrada del Kurama y dejarse llevar físicamente. En el vigésimo primer día, sintió una fuerte oleada de energía y perdió la conciencia. Al día siguiente, sintió una vitalidad y energía que nunca antes había experimentado.
Cuando bajaba la montaña, lastimó su dedo de pie, y por la imposición de sus manos al dedo, logró sanarse completamente. En los siguientes días, también logró sanar a otros, y se dió cuenta de que el propósito de su vida era sanar a los demás y ser instructor de su técnica de sanación.
Dr. Usui estableció una clínica en Tokio, Japón y llegó a ser reconocido por su técnica caracterizada por la imposición de manos. En 1923, se dedicó a desarrollar un sistema de enseñanza para preservar la técnica, y la enseñó a varios personas incluso hasta el nivel de Maestro que las permitía enseñar a otros. El Dr. Chujiro Hayashi, un médico y un infante de marina, fue uno de aquellos Maestros. Dr. Hayashi desarrolló aún más la técnica y se la enseñó a más Maestros de Reiki, incluso su cliente la Señora Hawayo Takata. La Señora Takata eventualmente aprendió la técnica y se la llevó al Occidente, donde hasta el día de hoy continúa extendiéndose y ganándose fama como una técnica de sanación alternativa.